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En voladera
Hace unos treinta años, la cría del Camachuelo común era cosa de criadores especializados, mientras que hoy en día su cría es masiva, resultado sin duda del formidable auge que experimenta nuestra afición. ¡Hay criadores que llegan a criar hasta 100 jóvenes camachuelos en una sola temporada!
¡Pero no nos engañemos! ¡La cría del Camachuelo común no es, ni mucho menos, cosa de principiantes! Es más bien el resultado de una especialización y de la aplicación de aquel principio que dice que es mejor pensárselo dos veces antes de actuar.
La cría empieza por el alojamiento de los pájaros. Como ocurre con el resto de las especies europeas, será fundamental la limpieza estricta de jaulas y voladeras. Los posaderos, comederos y bebederos deben estar absolutamente limpios en todo momento. El suelo de la voladera, seco como la arena del desierto. Al igual que el Verderón, el Camachuelo es, por desgracia, muy sensible a la coccidiosis y los pájaros afectados mueren rápidamente.
Nuestros Camachuelos comunes deben ser objeto de una observación constante. Si los vemos embolados, demasiado tranquilos según nuestra opinión, será mejor cogerlos en la mano y, con delicadeza, controlar su bajo vientre. Si lo vemos rojo, será síntoma, en la mayoría de los casos, de la presencia de coccidiosis. Con un tratamiento de E.S.B.-30% quizás recupere la salud, pero si el o los enfermos están muy delgados, es aconsejable instalarlos en una jaula de observación, en un ambiente caldeado entre 28ºC y 32ºC. Y si tenemos dudas sobre nuestro diagnóstico, lo mejor es recurrir a la opinión de un veterinario.
Para el tema del nido, hay múltiples posibilidades. Al principio, se reutilizaban los nidos del mirlo o del tordo, incluso del Verderón. Pero con este modo de actuar corremos el riesgo de introducir parásitos en nuestro aviario, como el piojo rojo, por ejemplo. Podemos utilizar también nidos de alambre trenzado, con una copa de fibra de coco, para hacerlo más confortable, de lo que ya hemos hablado anteriormente. Fijaremos este nido sobre una tablilla y lo rodearemos de ramas de conífera, para preservar la intimidad. Este sistema de nidificación dirigido no es sólo decorativo sino también eficiente y robusto.
Evidentemente, los Camachuelos comunes pueden construir sus nidos sin nuestra ayuda. Pero no debemos olvidar que a estos pájaros les gusta construir su refugio en rincones escondidos.
Es la hembra sola la que construye el nido. La única intervención del macho en la construcción es más bien negativa: se entretiene retirando materiales del nido ya construido, para presentárselos a la hembra. Por el contrario, es un campeón por lo que se refiere a seguir a la hembra allí donde vaya, haciéndole la corte y cantando, si podemos hablar de canto, que es más bien poco armonioso.
A finales de abril o principios de mayo aparecerán los primeros huevos. Si el tiempo es suave, esto podría ocurrir incluso quince días antes. Los huevos, cinco o seis, son de un color verde azulado suave, con varios puntos de color rojo oscuro, a veces bruno claro en el extremos obtuso.
Durante los tres primeros días posteriores a los nacimientos, el macho alimentará a la hembra en el nido y ésta regurgitará a su prole; pasado este lapso de tiempo, el padre alimentará directamente a los pequeños. Durante sus primeros días, los recién nacidos sólo reciben proteínas animales como larvas, gusanos de la harina, gusanos buffalo, huevos de hormiga, pulgones verdes, etc. En cuanto los pollos alcanzan los seis días de vida, la dieta se modifica con el añadido de semillas silvestres, como las de diente de león, hierba cana, álsine, lechugilla común, persicaria, diferentes cardos, onagra y gramíneas.
Los jóvenes Camachuelos comunes toman también pasta al huevo, siempre que los padres hayan aprendido a comerla antes. Si sólo se la damos durante la cría, los progenitores la ignorarán, ya que para ellos se tratará de un alimento desconocido.
Me gustaría hacer aquí un paréntesis: hace algunos años apareció un excelente producto (premix) en el mercado, llamado “Aves”. Fue compuesto por un nutricionista aviar, J.P. Holsheimer, y aportó una gran mejora a la cría de pájaros europeos.
Las recetas que incorporo a continuación nos ayudarán a criar prácticamente todos los pájaros de nuestro continente.
Ingredientes
• tres galletas o 30 g de pan rallado
• un huevo duro (cocido durante 7 minutos), sin olvidar pelarlo.
• una medida de Aves
Preparación
Mezclar durante 5 segundos.
Esperar un minuto y mezclar de nuevo durante 3 segundos. Prepararemos una mezcla nueva cada día, para garantizar su frescura, a pesar de que puede conservarse durante una semana en el refrigerador.
Es posible que el macho del Camachuelo común, como ocurre en otras especies, importune a la hembra durante la incubación o muestre un carácter agresivo, llegando incluso a estropear el nido o a tirar fuera del mismo los huevos e incluso a los pollos. En ese caso, intervendremos rápidamente y colocaremos al macho en una jaula situada al lado del nido. No tenemos porqué preocuparnos, la madre criará ella sola a sus pequeños, sin ningún problema.
Muda juvenil
Una vez independizados, los jóvenes Camachuelos comunes deberán ser separados de sus padres, ya que el padre se comportará de forma belicosa frente a ellos. Puede llegar a ser tan agresivo, que incluso provoque la muerte de alguno de ellos y sería una pena perder algún novel de esta forma en ese estadio de la cría.
No es preciso insistir en que los jóvenes deberán ser alojados en jaulas o voladeras limpias. Buscaremos un lugar tranquilo, ya que los jóvenes se asustan muy fácilmente. No debemos olvidar tampoco que a estos pájaros les gusta mucho el sol y que prefieren lugares bien aireados y soleados.
Los Camachuelos comunes en muda necesitan una alimentación nutritiva y variada. Continuaremos dándoles la pasta al huevo ya mencionada. Bayas de serbal y de pyracantha maduras, frambuesas, fresas, moras son no sólo golosinas para ellos, sino que, además, ayudan a proporcionar un bonito color rojo a los machos jóvenes.
Ejemplar de concurso
Asumo que todos estaremos de acuerdo en convenir que los Camachuelos comunes son las estrellas entre los pájaros europeos presentados a concurso. Esto se debe, entre otras razones, a su aspecto robusto, a sus zonas coloreadas bien delimitadas y al rojo profundo que luce el macho. Pero, de hecho, lo más notable en el Camachuelo común es la forma en la que se comporta: tranquilo, lleno de confianza y soberbio, todo ello rematado por una pose altanera.
Y estas son en resumen las cualidades que se exigen a un pájaro de concurso. Pero antes de llegar a esto, será necesario acostumbrar a los jóvenes Camachuelos a sus jaulas de concurso. Para ello, adiestraremos al Camachuelo utilizando una jaula sin puerta colgada en la voladera., en cuyo interior habremos dispuesto algunas golosinas, para atraer al pájaro: semillas de girasol germinadas, pasta al huevo, bayas de serbal, etc. De esta forma, se acostumbrará de manera natural y sin darse cuenta a ese objeto extraño que es la jaula de concurso. ¿Sabíais, por otra parte, que en Gran Bretaña casi todos los pájaros son adiestrados siguiendo este método?
Si bien todos sabemos que el pájaro que participe en los concursos deberá haber mudado bien, en el caso del Camachuelo común esto es particularmente cierto. No hay que olvidar que los Camachuelos en muda son muy sensibles a los cambios (desplazamientos, cambios de iluminación) y, sencillamente, pueden detener la muda sin previo aviso.
Una vez la muda completamente terminada, alojaremos al Camachuelo común en una jaula de exposición, con la parte delantera recta, contra cuya cara interior habremos colocado una hoja de plástico translúcido o plexiglás.
Para los Camachuelos comunes es mejor utilizar el modelo T.T., que tiene una profundidad de 18 cm. En jaulas con sólo 15 cm de profundidad, se corre el riesgo de que rémiges y rectrices se estropeen. Cada vez que nos presentemos delante de la jaula, procuraremos llevarle una golosina al pájaro, que una vez adquiera la confianza suficiente, vendrá a coger de entre nuestros dedos.
No hay ni que decirlo: el pájaro que vaya a ser presentado a un concurso deberá responder a las exigencias requeridas en lo que se refiere a color y diseño. Ocurre a veces que el color del macho no es uniforme. Sin embargo, el juez deberá hacer gala de circunspección en el enjuiciamiento del color del pecho. Así, por ejemplo, en el pequeño Pyrrhula p. europae, el pecho es de un color mucho más suave que en el Pyrrhula p. iberiae. Lo mismo podemos decir de las razas grandes, entre las que el Pyrrhula p. germanica presenta un pecho más claro que el gran Pyrrhula p. major.
Los diseños son idénticos en los dos sexos. El juez se interesará más en el diseño de las alas, que aparece a veces irregular. El origen de este defecto hay que buscarlo en su ausencia o en la excesiva pequeña talla puntual de las rémiges. Esta ausencia o defecto produce, evidentemente, una discontinuidad de la banda alar.
Otro signo bien aparente en el Camachuelo común es la presencia de la máscara y del capuchón negros. La atención de los jueces se centra aquí en una delimitación nítida de estas zonas. A veces se presenta un ligero esclarecimiento de la tonalidad, lo que constituye, evidentemente, una falta de color.
Un Camachuelo común realmente espléndido llama la atención del espectador por la posesión de puntos rojos sobre las pequeñas rémiges. Puede ocurrir a veces que el Camachuelo presente plumas coberteras colgando sobre la cola. Esto no hay que considerarlo como una falta, sino más bien como una característica.
Si bien con los dos sexos podemos obtener éxitos en los concursos, los machos concursan en mayor número que sus compañeras. ¿Por qué? Es evidente. En primer lugar, por paradójico que pueda parecer, se crían más machos que hembras. Después, y también muy a tener en cuenta, la vida de una hembra de Camachuelo es manifiestamente más corta que la de un macho. La puesta de huevos influye en ello de forma clara, constituyen incluso un momento de riesgo. Las hembras están a menudo en el origen de bonitos cruces, mientras que los machos no se consideran para estos menesteres.
Durante el transporte, es conveniente cubrir las jaulas con una funda. Protegeremos así a nuestros pájaros de corrientes de aire y de otros riesgos inherentes al transporte. A pesar de todos nuestros cuidados, los Camachuelos pueden sufrir trastornos respiratorios, que antes significaban su condena a muerte. La ciencia moderna permite hoy en día una vía de escape mediante un adecuado tratamiento veterinario.
Mutaciones del Camachuelo común
Camachuelo común pastel
El primer aficionado que consiguió fijar una mutación genética en el Camachuelo fue Rudy Driesmans. Se trató de un mutante pastel, que Rudy obtuvo de un criador de Overijse. Se trataba de un Pyrrhula p. coccinea, de sexo femenino, que no presentaba una de las mejores condiciones, lo que no fue obstáculo para que al año siguiente fuese acoplada con un macho de Pyrrhula pyrrhula pyrrhula, obteniéndose dos jóvenes machos.
Se vio después que la mutación pastel presenta una herencia ligada al sexo. Los machos eran pues, con toda seguridad, portadores de pastel. Las jóvenes hembras no podían, evidentemente, transmitir el color pastel (las hembras no pueden ser portadoras de una mutación con herencia ligada al sexo).
Al año siguiente, Rudy acopló los dos portadores con las hembras de Pyrrhula pyrrhula pyrrhula. De estas uniones nacieron, junto a hembras pastel, machos ancestrales portadores de pastel y, evidentemente, también machos y hembras ordinarias. El tercer año acopló un macho portador de pastel con una hembra pastel, de donde nacieron los primeros machos pastel.
En el número de julio 1976 del “Monde des Oiseaux” se publicó un artículo titulado “La domesticación del Camachuelo común”, escrito por Rudy Driesmans y nuestro amigo Marc Maertens. Los autores describían las experiencias que habían vivido con los primeros Camachuelos pastel. El nombre de Rudy Driesmans no es desconocido entre los aficionados a los pájaros; el de Marc Maertens posiblemente sí, porque por desgracia, no sobrevivió a un accidente que sufrió en 1978. ¡No tenía más que 27 años! Aún lo veo ante mis ojos, un gigante de más de 2 metros de altura, sentado en uno de mis sillones, con mi otro amigo Rudy, los tres hablando de … ¿adivinad de qué? ¡De pájaros, evidentemente! Momentos que no olvidaré nunca, que permanecen grabados en la memoria. Rudy y yo somos tranquilos, pero Marc, que se reía de todo y de nada…
El Camachuelo pastel concursa a menudo a pesar de que no se trata de un pájaro fácil. De hecho, el factor pastel no es siempre igual y sufre grandes variaciones en los colores. Encontramos así pájaros con el capuchón oscuro y alas muy claras, mientras que el estándar exige un color idéntico para todas estas partes del cuerpo. Pensándolo bien, se trata de una mutación que aparenta ser más un desafío.
Camachuelo común bruno
La primera vez que oí hablar de Camachuelo bruno fue en 1983. Nacido de un grupo de pájaros de color ancestral en un criadero en Diepenbeek, una visita que le hice me hizo ver que se trataba realmente de un bello pájaro bruno, que no estaba ni en venta ni se intercambiaba. En una segunda visita, acompañado por Rudy Driesmans, tampoco conseguí hacer cambiar de opinión a su propietario. Ironías del destino, algunas semanas después me enteré de que el Camachuelo había muerto.
Quizás os preguntéis qué hace una anécdota como la que acabo de contar, en este libro. Sencillo, quiero dejar claro que no todas las mutaciones han llegado a Blankenberge, a casa de Rudy Driesmans, sino que, por desgracia, las hay también que se han perdido para siempre. La prueba es que ya en 1968 “Le Monde des Oiseaux” publicaba una litografía de Herman Heinzel representando un Camachuelo bruno.
Por suerte, algunos años después nos enteramos de que Jules De Brouwer, de Ninove, se afanaba en la creación de una cepa de Camachuelos bruno. Los colores de aquellos pájaros eran idénticos a los del que había visto en Diepenbeek. Jules puede enorgullecerse de haber conseguido él solo una cría de calidad de pájaros brunos, que ha dado origen a magníficos ejemplares de concurso, con una librea muy bonita y uniforme.
Camachuelo común perlado
En el curso de 1982, un criador de Schriek anunció que tenía un Camachuelo común macho con las rémiges y las rectrices grises. Acompañado de Rudy Driesmans, visité sin demora al criador. El pájaro poseía efectivamente rémiges y rectrices gris oscuro y presentaba además manchas blancas sobre las alas y la cola (lo que es bien visible en la foto), e incluso sobre el capuchón. Por otra parte, este Camachuelo “perlado”, como habíamos decidido llamarle, tenía unas patas muy claras y un pico descolorido.
Se trataba del ancestro de una pequeña cepa de Camachuelos perlados que formó Rudy. El interés por este pájaro es de alguna forma incomprensible, inexistente o casi, aunque se trate de una mutación especial. En el Sizerín hay una mutación comparable, que tampoco ha conseguido despertar la atención de los criadores (ver el capítulo dedicado a los Sizerín).
Creo que habría que prestarle una mayor atención a una mutación tan rara. Me temo mucho, que si los Camachuelos perlados desapareciesen, lo harían para siempre. A pesar de que todos queremos que las mutaciones existentes permanezcan puras, queda todavía mucho camino por recorrer y muchos obstáculos que sortear.
Estoy persuadido de que aparecerán nuevas mutaciones en el Camachuelo común. ¿Quién sabe si el Camachuelo común perlado será el compañero ideal para futuras combinaciones de cría?
Herencia
Los Camachuelos pastel y bruno tienen una herencia ligada al sexo, lo que en teoría daría:
bruno x bruno
50% machos brunos
50% hembras brunas
bruno x ancestral
50% machos ancestrales / bruno
50% hembras brunas
ancestral x bruno
50% machos ancestrales / bruno
50% hembras ancestrales
ancestral / bruno x bruno
25% machos ancestrales / bruno
25% machos bruno
25% hembras brunas
25% hembras ancestrales
ancestral / bruno x ancestral
25% machos ancestrales / bruno
25% machos ancestrales
25% hembras brunas
25% hembras ancestrales
Los machos portadores de bruno nacidos de esta combinación no pueden diferenciarse de los otros machos brunos más que mediante acoplamientos de prueba.
Los resultados que acabamos de ver son igualmente válidos para el Camachuelo pastel. Bastará con que sustituyamos el término “bruno” por el término “pastel”.
El Camachuelo perlado tiene una herencia recesiva. Veamos lo que daría, en los ejemplos que siguen.
perlado x perlado
50% machos perlados
50% hembras perladas
perlado x ancestral
50% machos ancestrales / perlado
50% hembras ancestrales / perlado
ancestral x perlado
50% machos ancestrales / perlado
50% machos ancestrales / perlado
ancestral / perlado x ancestral / perlado
25% machos ancestrales / perlado
12,5% machos ancestrales
12,5% machos perlados
25% hembras ancestrales / perlado
12,5% hembras ancestrales
12,5% hembras perladas
Sólo con acoplamientos de prueba podremos determinar qué machos son portadores de perlado.
ancestral / perlado x perlado
25% machos perlados
25% machos ancestrales / perlado
25% hembras perladas
25% hembras ancestrales / perlado
perlado x ancestral / perlado
25% machos perlados
25% machos ancestrales / perlado
25% hembras perladas
25% hembras ancestrales / perlado
Camachuelo común bruno pastel
En el Camachuelo podemos reunir las mutaciones bruno y pastel; a partir de un macho doble portador y aunque se requiere su dosis de suerte, los primeros ejemplares han visto ya la luz vía crossing-over. Pájaros de una belleza maravillosa, eminentemente robustos y dotados de un color desvaído uniformemente repartido, despertarán sin duda el entusiasmo de los aficionados.
Camachuelo común ino
Existe también una mutación de ojos rojo oscuro. El aspecto exterior de esta mutación recuerda al del pastel, sólo que en los ino, los ojos son rojos, el pico y las patas, de color carne y el pecho del macho tiene una coloración rosa.
La herencia es recesiva, por lo que para los resultados de cría podemos remitirnos a los del Camachuelo perlado, reemplazando el término “perlado” por el término “ino”.
Camachuelo común bruno ino
Resulta de la combinación entre las mutaciones bruno e ino.
Mutaciones
Pastel, Bruno, Bruno Pastel, Alas diluidas, Perlado (Diseño Lizard), Ino, Albino, Amarillo.
Ficha Técnica
Podemos diferenciar 6 grupos de Camachuelos. Sólo pasamos a describir el primero de estos grupos, por ser el más habitual en los concursos.
Grupo 1
Forma nominal | Talla | Hábitat |
Pyrrhula pyrrhula pyrrhula | 17,5 cm | Europa y Asia del norte |
Subespecies | Talla | Hábitat |
Pyrrhula pyrrhula germanica | 16,5 cm | Alemania, Italia,ex Yugoslavia |
Pyrrhula pyrrhula europae | 14 cm | Francia, Bélgica, Alemania |
Pyrrhula pyrrhula major | 19 cm | Polonia, Escandinavia |
Pyrrhula pyrrhula iberiae | 14 cm | Península Ibérica |
Pyrrhula pyrrhula pileata | 14 cm | Islas Británicas |
Pyrrhula pyrrhula caspica | 14 cm | Irán septentrional |
Pyrrhula pyrrhula cassini | 15 cm | China del norte, Japón |
Pyrrhula pyrrhula cineracea | 15,5 cm | Manchuria, Usuri, Altai |
Pyrrhula pyrrhula griseiventris | 15 cm | Japón, Islas Kuriles, China, Manchuria,Usuri |
Pyrrhula pyrrhula rossikowi | 14 cm | Cáucaso, Turquía |
Pyrrhula pyrrhula murina | 15 cm | Islas Azores |
Grupo 2
Pyrrhula erythrocephala | 14 cm | Himalaya |
Grupo 3
Pyrrhula aurantiaca | 14 cm | Montes del Himalaya del noroeste |
Grupo 4
Forma nominal | Talla | Hábitat |
Pyrrhula nipalensis nipalensis | 17 cm | Himalaya, Suroeste de China y Formosa |
Subespecies | |
Pyrrhula nipalensis waterstradti | |
Pyrrhula nipalensis ricketti | |
Pyrrhula nipalensis victoriae | |
Pyrrhula nipalensis uchidai |
Grupo 5
Forma nominal | Talla | Hábitat |
Pyrrhula erythaca erythaca | 15 cm | Himalaya oriental, China y Formosa |
Subespecies | |
Pyrrhula erythaca wilderi | |
Pyrrhula erythaca owstoni |
Grupo 6
Forma nominal | Talla | Hábitat |
Pyrrhula leucogenys leucogenys | 14,5 cm | Islas Filipinas |
Subespecies | |
Pyrrhula leucogenys mindanao | |
Pyrrhula leucogenys coriara | |
Pyrrhula leucogenys sterei |